
“Mi madre es un pilar fundamental para mí, ella siempre ha estado ahí, tanto en los buenos como en los malos momentos. Siempre me ha apoyado, incluso cuando tuve un bajón en el que quise dejar todo y renunciar a lo que me gusta, gracias a ella hoy me puedo dedicar a lo me gusta. Qué tu madre siempre esté apoyándote es algo fundamental para cualquier deportista”, confiesa el azulón Nano.
Fede, meta de ElPozo Murcia Costa Cálida, también destaca la importancia de su madre en su vida: “Mi madre es una pieza angular en mi vida, siempre que tuve que tomar una decisión con respecto al deporte ella me apoyó en todo momento. Cuando era más pequeño ella me llevaba y me recogía de los entrenamientos y los fines de semana íbamos de un sitio para otro para jugar partidos. Ella nunca puso ninguna pega, siempre nos ayudó, tanto a mi como a mi hermano, y en todo lo que podía nos facilitaba el hecho de practicar deporte. Sin ella no podría estar donde estoy”.
Eloy Rojas, jugador del Palma Futsal, recalca los sacrificios de su progenitora en los comienzos de su carrera deportiva: “Mi madre es fundamental en mi vida, tanto deportivamente como extradeportivamente. Desde que tenía tres años y yo practicaba deporte ella siempre se ha sacrificado por mí y mi hermano. Gracias a ella y a mi padre tengo lo que tengo a día de hoy. Sin ellos no somos nadie””.
A todos les gustaría pasar este día tan especial al lado de sus madres, pero el confinamiento y la situación laboral hace que ese momento tenga que esperar, tal y como relata Fede: “Me gustaría acordarme de ella, darle un beso muy fuerte. Por circunstancias no puede ser, pero para mí es un orgullo que no pueda ser porque sigue trabajando, porque está al pie del cañón ayudando a la gente que lo necesita. Es un orgullo tenerla como madre. Seguro que pronto lo podemos celebrar gracias a gente como ella que sigue trabajando”.
