Darío, jugador de ElPozo Murcia, protege el balón ante Juanfran, de Pescados Rubén Burela.
Darío, jugador de ElPozo Murcia, protege el balón ante Juanfran, de Pescados Rubén Burela.
ElPozo Murcia se hizo con el triunfo en el encuentro que abrió la jornada sabatina en Primera División. Los de Diego Giustozzi consiguieron los tres puntos gracias a los tantos de Álex, Darío y Fernando, manteniéndose invicto en el Palacio. Los gallegos, por su parte, continúan sin estrenar su casillero de triunfos, sumidos en el farolillo rojo de la tabla.

Ambos conjuntos comenzaron el encuentro midiéndose, sin generar ocasiones de peligro en los primeros compases del partido. En el minuto cinco Matamoros estuvo cerca de adelantar a los suyos con un escorado disparo que se topó con Fede. Pero fue Álex quien adelantó a los rojillos en el minuto ocho, con un disparo a la media vuelta a la salida de un saque de esquina.

Darío marcó el segundo en el minuto 12, después de ser asistido por Paradynski antes de batir a Edu desde el segundo palo. A falta de tres minutos para el final de la primera mitad Fernando estuvo cerca de marcar el tercero, pero su disparo se topó con un acertado Edu. Respondieron los visitantes, pero Joselito se encontró con Fede.

La escuadra dirigida por Juanma Marrube salió a la segunda mitad ejerciendo una presión alta sobre los murcianos, tratando de dificultar su salida de balón. Cinco minutos después de la reanudación Matamoros estuvo cerca de recortar distancias, pero su disparo picado impactó en Fede.

Los locales encarrilaron la victoria en el minuto 35 después de que Fernando aprovecharse una imprecisión a la hora de sacar el balón para disparar, desviando Pope el balón al fondo de las mallas. El tercer tanto de los locales obligó a que Juanma Marrube emplease a Matamoros como portero-jugador para intentar recortar distancias en el marcador. Algo que surtió efecto ya que Matteus desvió al fondo de las mallas un potente disparo de Joselito desde fuera del área para poner que 3-1 definitivo.

FICHA TÉCNICA DEL ENCUENTRO