José García Román, presidente del Córdoba Patrimonio de la Humanidad.
José García Román, presidente del Córdoba Patrimonio de la Humanidad.
José García Román, presidente del Córdoba Patrimonio de la Humanidad, concedió una entrevista a La Voz de Córdoba en la que habló de como afronta la nueva temporada el conjunto que preside. El máximo dirigente de los cordobeses también valoró el perjuicio económico que supone el retraso de la competición en Primera División.
Sobre la pretemporada de la escuadra cordobesa, señaló que: “Nos hacía falta empezar ya, llevábamos sin competir desde marzo. Pero como nos dijeron que empezábamos el 4 de septiembre, la maquinaria (los jugadores, pagar sueldos, alquiler…), todos esos gastos comenzaron a moverse a mediados de julio. Hace falta ya que se empiece a mover el balón, por patrocinadores, etc..”. 

Al ser preguntado por qué pasó para que se suspendieran los partidos de pretemporada y para que el calendario de liga se haya retrasado, afirmó que: “Nosotros poco podemos decir. Habría que preguntar a la RFEF por qué se tira al barro y dice que la liga va a empezar el 4 de septiembre; nos obliga a empezar a mediados de julio, porque los jugadores llevaban muchos meses inactivos y era una pretemporada peculiar. Para jugar partidos amistosos hay que pedir una autorización a la RFEF y empezaron a denegárnosla porque no había protocolo. Lo cual creo que es una falta de previsión, no solo de la RFEF, sino también del Gobierno. Lo que hay es que mirar al futuro y pensar que ya tenemos fecha de comienzo. Ojalá volvamos a la normalidad y no se suspendan jornadas, porque la situación es la que es”.

En cuanto al perjuicio económico que supone el retraso del inicio de la competición, explicó que: “Aunque haya dicho de apoyarte vive con cierto recelo que decían que iba a empezar el 4 de septiembre y ven que no comienza. La publicidad del equipo nos va bastante bien, pero no tengo nada cobrado. Creo que, con buen criterio, los empresarios están esperando a que empiece a rodar el balón”.

Sobre el hecho de jugar partidos a puerta cerrada, señaló que: “Es un factor importante, pero en parte lo preveíamos. Para nosotros, el año pasado el público entre abonos y taquilla nos supuso un tercio del presupuesto, pero a la hora de presupuestar este año he disminuido los ingresos de este tipo a la mitad. Somos conscientes de que va a ser complicado. El protocolo que acaba de aprobar el CSD habla de que en espectáculos deportivos, en cerrado, no supere las 500 personas. Aquí con 500, difícilmente vas a cubrir el presupuesto que tenemos. Se trata de reinventarnos, ya que no va a ser una situación fácil para nadie, pero intentar sacarla adelante lo mejor posible”.

En cuanto a como puede afectar la crisis del COVID-19 a los clubes de Fútbol Sala, indicó que: “A todos nos va a afectar. A la mayor parte de los clubes nos va a disminuir el capítulo de ingresos. Esperemos que no caiga ninguno. Al menos, en nuestro caso mantengo que quizá seamos de los que menos paguemos de la Primera División, pero una de nuestras señas de identidad es que, como siempre digo, aquí todo el que viene gana más de lo que ha firmado en contrato”.

El máximo dirigente del Córdoba Patrimonio habló del nuevo proyecto de cara a la temporada 20-21: “Estamos en la mejor liga del mundo y sabemos que no podemos estar en el alambre, máxime una temporada como esta en la que pueden bajar hasta cuatro equipos. Desde el primer momento, nuestra idea ha sido reforzar la plantilla, subir el nivel con respecto al año pasado y, sinceramente, con los fichajes que hemos hecho lo hemos conseguido sobradamente”.